Me voy moviendo, en un mar violento. Me voy quedando, asustado y muerto. Esperando.
Moviéndome en tu cabeza, como un torbellino. Un ciclón encadenado, desde mi corazón a mi boca. Desatando sentimientos. Que afloran. Afloran. Desatan un grito en mi garganta. Que rompe el hielo que me cubre. Que lo resquebraja. Desde dentro hacia fuera. A la velocidad del sonido. Escuchando en mi cabeza Sunday Morning. Esperando que aparezcas desnudo y filosófico. Sucio y distante. Como un punkie del 77 teletransportado al 2008. Una foto retocada por el tiempo. Un instante que no existió, pero recuerdo. Mentiras, ya lo sabes.