¿EUROPA?

No, no voy a hablar de música, ni de la gran canción de Mónica Naranjo.

Voy a hablar de Europa, de esa cosa que prometía tanto, pero se ha quedado en un conglomerado, en una suma de estados que últimamente da saldo negativo.

Andamos escasos de líderes con visión y perspectiva del camino a seguir. Estamos faltos de ideas, de proyecto sólidos y sociales. La Unión se queda obsoleta y muere en refritos de tratados que no acaban de enganchar a una ciudadanía cada día más alejada, viendo en la Unión un proyecto lejano y distante.

Se ha aprobado la directiva para una jornada laboral de 65 horas semanales. Se ha aprobado la gran directiva de retorno de inmigrantes ilegales, tratándolos como si fueran delincuentes y permitiendo su retención 18 MESES! en CAMPOS DE INMIGRANTES!
huele a tufo en Bruselas. Criminalizando a los inmigrantes escurren el bulto de sus incapacidades para elaborar un proyecto europeo SOCIAL, donde la SOLIDARIDAD sea el baluarte ante cualquier decisión. Donde lo COMUN sea el hecho a concurrir, no la diferencia. Y lo COMUN es hacer de EUROPA un modelo político, social, económico, cultural, nuevo, algo que no ha existido jamás, más cercano a una cultura de civilizaciones que a la ONU.

Entre los éxitos del proyecto comunitario, aparte del económico, de la paz entre potencias, yo destacaría la creación una ciudadanía europea, más o menos todos los ciudadanos son conscientes de su pertenencia a la Unión Europea y de sus derechos y deberes con esta. Pero esa ciudadanía ya no ve el faro que le alumbraba, con la entrada de estas medidas neoliberales, más propias de un Reino Unido euroescéptico, que de una Francia, Italia y Alemania fundadoras.

El NO al Tratado de Lisboa de Irlanda, aparte de suponer un revés a este camino, también se entiendo como un NO de este país a disolverse en el mar de la Unión. También puede marcar un rechazo de la ciudadanía a lo que la Unión viene haciendo desde hace años. El Tratado de Niza ya empezó a ser un poco un exceso de cava en la cabeza de algunos, con tanto dolor de cabeza en la elaboración del sistema de votación,la redacción del Tratado para la Constitución Europea en la Convención, determinó que estilo de política estaba llevando a cabo la Nueva Unión Europea. Y ahí sigue, con líderes que siguen reclamando su poder dentro de la Unión, en una ceguera hedonista, políticos que igual que se pasan por el WC las leyes de su país, se pasan por el mismo lugar a la UE y sobre todo una pérdida de las clases maestras que aportó Jean Monnet. Didáctico, pedágogo, hablaba de construir en lo común, de ir paso a paso. Es más eficiente determinar una serie de cuestiones que abordar, realizarlas y superarlas y realizar el siguiente paso, que meterse en grandes proyectos ininteligibles, dificultosos, que crean mecanismos de actuación tan frágiles que se rompen en un referendum de un país que representa una mínima parte de la Unión.

¿Unión Europea de dos velocidades? ¿Neoliberalismo brutal? ¿Líderes sin vergüenzas? ¿Directivas conservadores y reacias?

Quizás haya llegado el momento de hacer limpieza dentro de la Unión y plantearse si sigue mereciendo la pena este sueño (pesadilla) europea. Desde luego ASÍ NO