JaMáS

Era tan solo una pequeña migaja de pan, cayendo desde su boca y yo lo miraba con envidia, desde mi pequeñez y mi distancia el infinito me hacia la boca agua, quería que esas migajas de pan fueran mi infinito para controlarlo y asi no parecer tan absurdo. Otros días me planteé robar rayos al sol y guardarlos debajo de mi cama, aunque nos cegaran a todos y no pudieramos verlos..., quizás asi nos convertiríamos en una luna. Una luna eterna. Estática. Perfecta e indefensa.
Y si decido huir lejos, andando sobre el agua del mar, recogiendo su sal y esparciendola por el aire, espero que la gente me vea mientras me voy despidiendo. Mientras voy localizando el infinito en cada parte del día que me hace llorar.
No soy absolutamente tonto, soy como dos planos que no llegan a encontrarse hasta el infinito, alargando distancias y buscando mi miga de pan eterna. Como si me convirtiera en una pequeña hormiga. Necesito tener y encontrar mi pequeño hormiguero.
El universo se me antoja enorme, yo solo quiero un espacio finito. Un espacio que pueda encontrar en un beso, en una canción o en mi mismo. Dejadme un rincón en vuestro universo... pequeño o grande