Ya no recuerdo el tiempo que hacia que nos sentabamos a hablar. Ni recuerdo cuando fue la última vez que tuvimos una conversación que no fuera sobre cosas estúpidas. Ahí los dos en tu coche, como si los caminos que un día tomaron un rumbo diferente nunca los hubieran tomado, con la misma naturalidad que cuando hablabamos delante de tu casa en verano.
Y la verdad que reencontrarse con alguien y con uno mismo da una grata sensación de que las cosas van bien, aunque sea solo un instante, saber que no todo se perdió y que no somos tan distinos a como eramos. Ver que no todo siempre es mentira.

ALL I WANT FOR XMAS IS YOU (MARIAH CAREY)